Ya queda poco

Estos días no os hemos puesto al corriente de tooooodo lo que hemos trabajado, pero nuestra pequeña montaña de juguetes ha bajado ostensiblemente y ¡vemos la luz!


Sin embargo, en el Rastro de Juguetes no es todo reciclar, ordenar y limpiar, también tenemos tiempo para SONREIR, LEER, JUGAR y sobre todo, DISFRUTAR.

Con los años, el Rastro de Juguetes se ha convertido en una gran familia en la que todo el mundo aprende de los demás sean mayores o pequeños.
Nuestros niños y niñas nos ayudan a ponernos al día, a entender esos juegos tan novedosos que se nos escapan y que ellos ven a diario en los anuncios o con los que juegan en las ludotecas y con sus amigos.
Nuestros pequeños y pequeñas son la parte más gratificante del Rastro, porque no solo aprenden qué es la solidaridad sino que son el futuro.

¡Un hurra por estos duendecillos!